Coloca el cabezal adecuado según la superficie que desees limpiar (facial, corporal o de hogar). Sostén el cepillo en tu mano, enciéndelo con el botón de encendido, y desliza sobre la superficie. Ajusta la presión según la zona de aplicación. Puedes usarlo tanto en seco como bajo el agua. La carga completa te permite usar el cepillo por hasta 2 horas, asegurando que tengas suficiente tiempo para realizar la limpieza que necesitas.